Recetas coreanas

Con esta receta podrás hacer tu propia versión de una de las últimas tendencias de comida callejera coreana: pollo frito muy crujiente, una rápida ensalada de kimchi y salsa de chile en abundancia.

La panceta de cerdo marinada, dulce y picante, es un plato rápido, perfecto para hacer a la parrilla (también se puede hacer a la plancha). Sírvelo con hojas de lechuga enteras, frescas y crujientes, para poder envolver el arroz y la carne en las mismas como si fuera un taco.

Prepara un salteado rápido con un filete de ternera, brotes de soja y espinacas sazonado con mirin dulce, ajo, semillas de sésamo y salsa de soja.

Estas tortitas de trucha, llenas de sabores orientales gracias a la salsa de soja, el jengibre fresco, las cebolletas y la salsa picante gochujang, se sirven coronadas con huevos fritos.

Picantes, dulces y pegajosas, estas alitas de pollo coreanas son una excelente opción para un entrante en una cena con amigos o familia. También las puedes acompañar con una buena ensalada (oriental si es posible) como plato único.

Este sencillo plato de arroz un poco picante lleva filetes de ternera marinados en salsa de chile y repollo rallado para darle un toque más crujiente. Es una receta fácil y rápida, la tendrás lista en apenas media hora.

Este receta de arroz coreano, que lleva espinacas, zanahorias, pavo y huevo frito, es una forma muy buena de aprovechar las sobras.

Este caldo coreano de almejas frescas, llamado 'jogaetang', es fácil de preparar y bajo en grasa y lo podrás tener listo en 20 minutos.

Estos muslos de pollo con adobo coreano son perfectos para comidas al aire libre. Sírvelos con ensalada de col y otras ensaladas de verano, ¡pero no olvides las servilletas!

Las brochetas siempre tienen éxito en las barbacoas, y este pollo coreano con glaseado dulce, picante y pegajoso es nuestro nuevo favorito. Esparcir las cebolletas picadas por encima para servir.

En solo 20 minutos desde la cocina hasta el plato, este sabroso panqueque al estilo coreano es perfecto para uno, y fácil de multiplicar si tienes invitados.

Este clásico coreano se elabora fermentando repollo y zanahorias en una salsa picante y ácida. Prueba esta versión rápida que puedes usar en arroces, carnes y pescados, por ejemplo.

Arroz frito rápido y fácil, lleno de verduras frescas y fermentadas. Los alimentos fermentados como el kimchi ayudan a potenciar las buenas bacterias intestinales.

El bibimbap es un clásico coreano que consiste en un bol de arroz lleno de delicias: filete en rodajas, huevo frito, espinacas, zanahoria y semillas de sésamo tostadas, además de salsa gochujang o sriracha para un toque picante.

Los noodles elaborados con fécula de boniato son los protagonistas de este plato clásico coreano, que también lleva tiras de filete tierno, champiñones y espinacas en una salsa sabrosa y ligeramente dulce.

El bulgogi es un plato clásico de la gastronomía coreana que consiste en ternera cortada en trozos finos y marinados en un adobo tradicional de ese país. La carne se fríe en la sartén para lograr un delicado equilibrio de sabores dulces y salados.

Estos 'tteokbokki', unos pasteles de arroz picantes al estilo coreano, puedes tomarlos como aperitivo o guarnición. Es una comida callejera popular perfecta para servir en cualquier banquete, especialmente de comida coreana.

Esta tortita al estilo coreano, llamada 'Kimchi jeon', está hecha con harina de trigo, col fermentada y salsa gochujang (pasta de pimiento rojo coreano), ambas muy saludables para el intestino. Es un plato delicioso, con un sabor picante y umami.