Estas delicadas galletas de mantequilla son un regalo personal que gustará a todo el mundo. Con un toque floral de agua de rosas, también puedes usar extracto de flor de azahar o lavanda seca.

Esta bruschetta, que lleva queso brie, nata, jamón serrano, cebolla y tomate, es perfecta para un desayuno tardío de fin de semana, o para servir como entrante, y también es una buena opción para aprovechar el queso sobrante. Añade unas hojas de rúcula por encima justo antes de servir.

Esta tartiflette, un plato originario de la región de Alta Saboya, en Francia, lleva patatas al horno con queso reblochon, nata, tocino y cebolla. Un clásico contundente que puedes hacer en tu casa muy fácilmente y tener en la mesa en menos de una hora.

Estos filetes de salmón con miso, vinagre balsámico y soja, servidos sobre una cama de fideos de arroz y brotes de soja son un plato principal fácil y rápido.

Este boeuf bourguignon, un estofado de ternera con vino tinto, es un clásico de la gastronomía francesa. Es un guiso delicioso que se cocina a fuego lento, perfecto para servir en cualquier comida con familiares y amigos.

Este puré de patatas francés con queso raclette sabe mejor si utilizas una variedad de patata versátil como Desirée. Es una receta fácil que podrás tener lista en media hora.