Las mejores recetas de bocadillos y sándwiches fáciles y diferentes

Este bocadillo se cocina al estilo de la cocina cajún: el bacalao se cubre con mantequilla derretida y especias antes de cocinarlo hasta que esté chamuscado para obtener un gran sabor ahumado.

Este bocadillo tiene todo lo que se le puede pedir a un bocadillo: el clásico sabor de la mortadela (compra la mejor calidad que te puedas permitir), la cremosidad de la burrata y el toque intenso del pesto de pistachos. Es perfecto como almuerzo para llevar, y prepararlo solo te llevará 20 minutos.

Este sándwich es perfecto para servir el día después de Navidad: solo tendrás que ahuecar una hogaza de pan y colocar todas las sobras navideñas dentro -carne, salsas, algo de lechuga o verdura-. Es muy versátil y puedes utilizar distintos ingredientes.

Estos bocadillos vietnamitas, que se caracterizan por elaborarse con carnes curadas, patés y verduras envueltos en una baguette (tradicionalmente hecha con harina de trigo y arroz), son muy versátiles. Nuestra versión vegana lleva verduras, hummus, un aderezo asiático y salsa picante.

Esta receta, inspirada en los bocadillos de langosta, es más económica y tiene un sabor potente gracias a la mayonesa de harissa y lima y a la salsa especiada de tomate y eneldo. Un plato perfecto para servir y dejar que cada comensal se monte su bocadillo al gusto.

Estos bocadillos son perfectos para aprovechar las sobras de tus festines navideños, puedes hacerlos con trozos de langosta, langostinos o gambón, que se acompañan de una salsa de cuatro quesos cremosa.

Estos pepitos de solomillo llevan una salsa relish casera (salsa agridulce muy popular en el mundo anglosajón) y mayonesa de mostaza y estragón. Es una receta perfecta para excursiones de fin de semana, si haces una barbacoa en algún merendero, o incluso en casa, ya que podrás permitir a tus invitados que se monten sus propios bocatas a su gusto.

Estos bollitos de pan francés con trozos de tocino y cebollino tienen un toque salado que va muy bien con la naturaleza dulce del brioche. Para esta receta necesitarás una batidora de pie, y no te preocupes si te sobran panecillos, se congelan muy bien, solo descongélalos y tuéstalos antes de comer.

Prepara pan de pita casero para servir con tu humus preferido, o con cualquier otro untable. Muy fáciles de hacer, se pueden congelar para utilizar en cualquier momento.

Este pan de pita sin trigo (aunque también puedes usarlo con trigo si quieres) se rellena con falafel, hummus, pimiento rojo y hojas de rúcula. Es un almuerzo saludable y delicioso que tendrás listo en 5 minutos.

Este sándwich saludable, inspirado en el clásico Club Sandwich, pero vegano, lleva aguacate, hummus, rúcula y tomates. Un almuerzo diferente que puedes llevar ya montado al trabajo, o que puedes preparar allí rápidamente, te llevará apenas 10 minutos.

Prepara este icónico sándwich Reuben estadounidense de la manera tradicional: una mezcla irresistible de corned beef (carne en conserva), chucrut, queso y salsa. Nosotros hemos añadido la opción del pastrami, en lugar de la carne en conserva, porque en España es más fácil de encontrar.

Estos sándwiches de torrijas en forma de corazón, rellenos de crema de chocolate y avellanas y cubiertos con avellanas picadas, son la mejor manera de empezar el día de San Valentín con buen pie.

Este sándwich, que puedes servir para un desayuno tardío de fin de semana o incluso un almuerzo ligero si lo acompañas de una buena ensalada, tiene todo lo que se le puede pedir a un bocadillo: queso derretido, jamón cocido salado y un toque dulce gracias a la mermelada de fruta.

Para elaborar esta versión del sándwich de huevo nos hemos inspirado en Japón. El relleno está hecho con una mayonesa japonesa que le da un toque mucho más sabroso y se corona con unos pepinos encurtidos rápidos.

Este sándwich vegetariano lleva tomates de temporada, ajo, tomillo limón y queso curado, además de un toque de mayonesa. El pan es muy importante en esta receta: elige uno de masa madre de buena calidad cortado en rebanadas gruesas.

Esta versión vegetariana del 'katsu sando', un sándwich japonés que normalmente lleva carne rebozada, está hecha con apionabo. Requiere un poco de esfuerzo, pero el resultado, crujiente, es impresionante, y además lo tendrás listo en 35 minutos.

¿Aburrido de los mismos bocadillos? Prueba este sándwich de sushi con atún suave de sashimi, jengibre encurtido picante y verduras crujientes. Además, esta receta fácil de onigirazu también es saludable.

Este sandwich de jamón cocido y huevo estará delicioso si eliges un pan de buena calidad

Este sándwich de queso a la plancha y jamón asado (u otra carne que tengas a mano) es fácil y rápido, perfecto para esos días en los que no apetece cocinar. Además, lleva doble de queso, por lo que es bastante contundente.

Esta receta, inspirada en un clásico del brunch, los huevos benedictinos, es deliciosa y te puede servir tanto para un desayuno tardío de fin de semana como para un almuerzo ligero con una buena ensalada.