Ensaladas templadas para cualquier estación del año

Una ensalada baja en grasas de inspiración oriental, ideal para cuando tienes un poco de prisa y mucha hambre.

Sorprende a tus invitados con este sofisticado plato de marisco y patatas con regusto a trufa.

Prepara una ensalada sofisticada, rápida y baja en grasas. Perfecta para una cena para dos, en menos de media hora.

Verde, deliciosa y no puede ser más fácil: calabacín en láminas, limón y albahaca. Sirve como entrante, o como una guarnición sin gluten.

Este delicioso plato primaveral saca partido a las alcachofas y los espárragos de temporada, que se aliñan con una vinagreta de aceite de oliva, cebolla, vinagre balsámico y cebollino.

Esta ensalada templada, que lleva calabacín a la plancha y salmón con un delicioso aliño de zumo de limón, mostaza y estragón, se acompaña con una ensalada de hierbas aromáticas.

Esta ensalada templada, que lleva garbanzos de bote, hinojo, pimientos, cebolla y también hierbas aromáticas como romero, laurel o perejil se aliña con aceite y vinagre. Un plato vegetariano fácil que puedes servir en cualquier época del año.
Una ensalada vibrante que sabe deliciosa tanto caliente como fría

Esta ensalada templada es perfecta para los meses donde ya no hace tanto calor: lleva ingredientes de temporada, como kale o achicoria roja, además de pollo y alubias suaves, si puede ser, elige alubias garrofón. Es un plato fácil que tendrás listo en media hora.

Esta ensalada templada que lleva berros, salmón, panceta, remolacha y guisantes, además de patatas y cebollino, es una opción muy saludable, rápida y fácil: lo tendrás listo en menos de media hora.

¿Hacer una ensalada en una olla de cocción lenta te suena un poco raro? La protagonista de este plato es la berenjena, que siguiendo este método se consigue que quede suave y tierna sin tener que trabajar sobre una parrilla o arriesgarte a quemaduras con pinzas sobre una llama abierta. Cuando la pruebes y veas lo fácil que es la incorporarás a tu repertorio sin dudarlo.

Esta ensalada templada, que lleva patatas, judías, panceta, tomate y huevo, es un plato fácil y muy equilibrado. Para hacer una versión vegetariana, simplemente no incluyas la panceta.

Esta ensalada tiene todos los ingredientes necesarios para convertirse en una de tus favoritas del verano: lleva melón y tomates cherry que aportan frescura, se acompaña con trucha asalmonada y se rocía con un aliño de chile y lima que le da un toque picante y cítrico delicioso. Un plato perfecto para servir en días de calor.

Este plato fácil, que lleva apenas media docena de ingredientes, como calabacín, gambas, arroz y albahaca, también se prepara muy rápido: lo tendrás en la mesa en 10 minutos.

Esta es una deliciosa ensalada que también lleva nueces especiadas y bulgur, es perfecta para servir junto a cordero o pescado a la parrilla, pero también es excelente para preparar comidas con antelación. Puedes reeemplazar el bulgur por quinoa o similar.

Esta ensalada de col lombarda, zanahoria, cebolla, mayonesa y lima va muy bien con carnes asadas y mazorcas de maíz, o en hamburguesas o bocadillos de carne desmenuzada.

Mezcla remolacha, zanahoria, feta, avellanas, quinoa y trigo bulgur (o cuscús), además de hierbas y el toque cítrico de naranja y limón, para hacer esta impresionante ensalada.

Esta ensalada sencilla se prepara muy fácilmente, solo necesitas dos botes de alubias cocidas, arroz, huevos, eneldo y un aliño de miso, limón y miel. Es una ensalada muy nutritiva sin ninguna complicación.

Esta ensalada, que se sirve fría, lleva arroz, espárragos, pimiento rojo, mozzarella y menta. Una comida fácil y con pocos ingredientes, que podrás tener en la mesa en 20 minutos.

Este sencillo plato de arroz es perfecto para aprovechar las sobras de pollo. Es una ensalada muy sabrosa gracias al potente aderezo de wasabi, lima y yogur.

Esta deliciosa ensalada de calamares, que lleva mango, aguacate y alubias, es perfecta para esas comidas de verano al aire libre. Marinar los calamares antes de cocinarlos les da profundidad de sabor.

Esta ensalada vegana, además de ser muy saludable, se elabora en cinco minutos y solo lleva seis ingredientes: lentejas verdinas cocidas, remolacha, nueces, menta, rúcula y vinagre. Una receta nutritiva, perfecta para los días en que apetece comer sano pero no hay tiempo para cocinar. También es una buena manera de aprovechar lentejas sobrantes.

Perfecta para llevar a la oficina, con pescado ahumado rico en omega-3, patatas nuevas, remolacha y un aderezo ligero de limón.