Flan de naranja con canela

Preparación

• paso 1

  Vierte la leche en una olla grande, añade la ralladura de naranja y la canela, mezcla bien y coloca a fuego medio. Lleva a ebullición y deja hervir a fuego lento hasta que la leche se haya reducido a 1/3. La manera más fácil de medir esto es usar una brocheta de madera larga, introducirla en la leche fría en la olla y marcar el nivel de la leche con tu dedo. Luego, usa un cuchillo afilado para hacer una pequeña muesca en la brocheta. Usa esta marca para comprobar la profundidad de la leche mientras se reduce.

• paso 2

  Para hacer el caramelo, pon 250g de azúcar y 125ml de agua fría en una olla pesada. Lleva a fuego lento y revuelve hasta que el azúcar se disuelva. Sube el fuego y hierve hasta obtener un caramelo dorado oscuro. Vierte en un molde redondo de cerámica o vidrio para horno (aprox. 19cm). Coloca el molde en una bandeja de horno profunda (tendrás que añadir agua caliente en el próximo paso).

• paso 3

  Una vez que la leche se haya reducido, calienta el horno a 160C/ventilador 140C/gas 3. Bate los huevos y 80g de azúcar en un tazón hasta que estén combinados pero no demasiado aireados. Cuela la leche reducida con un colador fino sobre los huevos y mezcla, tratando de no crear demasiadas burbujas. Cuela nuevamente la mezcla mientras la viertes con cuidado en el molde sobre el caramelo. Para hornearlo al baño maría, agrega suficiente agua hirviendo a la bandeja de horno para que llegue hasta la mitad de los lados del molde (puede que te sea más fácil hacerlo cuando la bandeja y el molde ya estén en el estante del horno ya que será bastante pesado).

• paso 4

  Hornea el flan al baño maría durante unos 30 a 40 minutos, hasta que esté cuajado pero con un poco de movimiento en el centro. Retira el flan de la bandeja y deja enfriar a temperatura ambiente. Refrigera en la nevera al menos 6 horas, o preferiblemente toda la noche

• paso 5

  Para servir, pasa un cuchillo de mesa alrededor del borde del molde. Coloca un plato grande sobre el molde y rápidamente inviértelo para liberar el flan sobre el plato.