CÓMO COCINAR ABADEJO
Puedes usar abadejo para cualquier receta que requiera bacalao, y tanto freír en sartén, como asar funcionan bien. Una costra de pan rallado, hierbas y un poco de aceite de oliva mantendrá el pescado húmedo, o prueba un rebozado de cerveza. Al igual que otros pescados blancos, también va bien con salsas cremosas. Para aprovechar al máximo el bajo contenido de grasa de este pescado, puedes escalfarlo en un poco de leche o cocinarlo en papillote (en un paquete de papel encerado) con hierbas, lemongrass, jengibre en rodajas y ajo.
QUÉ BUSCAR
Como cualquier filete de pescado blanco, busca carne translúcida, pero no te dejes desanimar por el color, que es naturalmente un poco más oscuro que el bacalao. Los filetes también deben ser uniformes sin manchas descoloridas. Las escamas del pescado crudo deben estar bien unidas sin que se formen secciones.
BENEFICIOS SALUDABLES
El abadejo, una fuente magra de proteína, aporta nutrientes buenos para el corazón, incluyendo magnesio, potasio y vitaminas del grupo B, y también es una excelente fuente de selenio que refuerza el sistema inmunológico.