Mejillones, delicosas y el marisco más barato

Esta versión rústica de los mejillones a la marinera puedes servirla directamente en la envoltura de papel aluminio, recién sacada de la barbacoa. Acompaña los mejillones con pan crujiente para absorber la salsa cremosa.

Este entrante de mejillones con migas crujientes y ajo es bajo en calorías, requiere un esfuerzo mínimo y es una excelente manera de aprovechar vino blanco sobrante.

Los meses fríos son la mejor época para probar estos mejillones rellenos de una mezcla de pan, ajo, mantequilla y nueces, además de aromáticas. Asegúrate de elegir mejillones grandes para que valga la pena el esfuerzo.

Un entrante o primer plato de marisco rápido, fácil y para chuparse los dedos. Mejillones y almejas cocidos en jerez y rematados con pan tostado y alioli. Todo lo que necesitas para servir son rebanadas de pan para mojar.

Esta receta de pasta y marisco tiene el sabor intenso y delicado de un plato servido en un restaurante. Es la comida perfecta para acompañar con una copa de buen vino blanco fresco.

En este plato la nduja, un embutido italiano picante elaborado con carne de cerdo, es la protagonista. Además de merluza (también puedes usar bacalao), el plato lleva mejillones y garbanzos y se adereza con una gremolata, una salsa italiana de perejil, ajo y ralladura de limón. Es una receta fácil y abundante, ideal para servir cuando tienes invitados.

Esta receta combina trozos de bacalao y mejillones frescos, que se cocinan en una deliciosa salsa de vino blanco y perejil. Sirve este estupendo guiso en tazones con un poco de pan de ajo crujiente.

Esta deliciosa sopa de pescado y marisco, que solo lleva cinco ingredientes: patatas, perejil, caldo de pescado, mejillones y una mezcla de distintos pescados, es muy fácil de hacer y también rápida, la tendrás lista en media hora.

Esta sopa suave y muy cremosa, con un sabor espectacular gracias al azafrán, es perfecta para servir como primer plato en una comida familiar o con amigos. Adornada con mejillones, tiene muy buena pinta y es más fácil de preparar de lo que parece.

Estas deliciosas tartaletas, que llevan una masa crujiente casera hecha con parmesano, son lo suficientemente especiales como para servir en la comida de Navidad o de Año Nuevo. Requieren un poco de esfuerzo, pero el resultado merece la pena.

Esta receta es una versión muy sencilla de los mejillones a la marinera, y solo lleva cuatro ingredientes: mejillones, vino blanco, chalotas y perejil. La tendrás lista en 20 minutos ¡más fácil imposible!

Este curry verde, muy aromático, es muy versátil, y si quieres podrías añadir también cualquier otro marisco, como gambas (si las vas a incluir, échalas a la vez que la leche de coco), y almejas (que puedes incorporar a la vez que los mejillones).

Las cervezas trapenses son cervezas maltosas, de alta graduación, que suelen tener un sabor más dulce. Añade un poco de nata y vete probando, añadiendo más al gusto si lo deseas para equilibrar los sabores de la cerveza. Sirve con patatas fritas crujientes y tendrás un plato principal para dos sencillo y delicioso.

Los mejillones, tan saludables y económicos, son un plato mucho más fácil de preparar de lo que la gente cree. Prueba esta receta sencilla para sorprender a tus familiares y amigos, gustará a todos.

El sabor potente de los mejillones y el chorizo combina de maravilla con las alubias cannellini y la col rizada (puedes elegir kale o cavolo nero) en esta comida ligera y sabrosa. Es un plato fácil y resultón que tendrás en la mesa en 25 minutos.

Este estofado de pescado del norte de Francia, un clásico de la gastronomía normanda a veces llamado 'Marmite Dieppoise', es un plato fácil y delicioso que lleva pescado blanco y mejillones y que tendrás listo en 40 minutos.

Este plato de pasta con marisco y 'nduja, un embutido italiano de cerdo, es perfecto para una comida de fin de semana acompañada de una copa de vino blanco fresco. Requiere un poco de esfuerzo, pero el resultado es espectacular y no tiene nada que envidiar a los platos de pasta de cualquier restaurante italiano.

Esta receta de mejillones con tomate con un toque picante gracias al chile es perfecta para una comida sofisticada y fácil para dos, pero también se puede preparar para un tapeo para compartir, solo te llevará 30 minutos.

Este plato de pasta cremosa con mejillones es lo suficientemente sofisticado para una velada especial y tan sencillo de elaborar que lo tendrás listo en menos de media hora.

Estos mejillones crujientes rebozados con pan rallado panko son perfectos para picar como un aperitivo o canapé antes de la cena en tu próxima reunión con familiares o amigos. La mayonesa de sriracha, el vinagre de miel picante y el aderezo ranch para mojar son los mejores acompañantes.