Bacalao con costra de limón y perejil
Un filete de bacalao se puede convertir en un plato elegante para cualquier ocasión especial, o para puro deleite de quien lo cocina. Exquisito y muy 'pintón'.

Encurtir las acelgas primero en vinagre les da un sabor muy profundo y las semillas de hierbas aromáticas aportan mucho sabor. Es perfecto para servir con caza o pescado carnoso como el rodaballo o el bacalao. Y, por supuesto, solas como plato único.
Valor nutricional: por ración
Para encurtir las acelgas, pon 400ml de agua en una cacerola grande o sartén con el anís estrellado, el azúcar y el vinagre. Coloca las especias restantes en una bolsa de tela atada con cuerda, agrégala a la cacerola, lleva a ebullición, luego añade las acelgas, primero el tallo. Presiona las acelgas en la cacerola y cocina a fuego lento durante 3 a 4 minutos. No te preocupes si no puedes cubrir completamente las hojas con el líquido, ya que se marchitarán y se sumergirán mientras se cocinan. Retira la cacerola del fuego y deja enfriar.
Calienta el horno a 180°C/160°C con ventilador/gas 4. Una vez frías, retira las acelgas de la mezcla de encurtido y sécalas con una toalla de cocina limpia. Coloca las acelgas en una fuente de horno del tamaño de una hoja A4. En un bol, bate la nata y el ajo junto con un poco de condimento, luego vierte sobre las acelgas. Espolvorea el queso y la pimienta de cayena, y hornea 30 minutos.